viernes, 5 de agosto de 2011

LA ARQUEOLOGIA Y LA HISTORIA EN MÉXICO


Las investigaciones y estudios que se hacen en México sobre la Civilización del Anáhuac, a la que la ideología criolla presume de desaparecida y que llama colonizadamente “prehispánica”, con muy escasas y honrosas excepciones no ha contribuido al fortalecimiento de la Identidad Cultural y el acrecentamiento de la auto estima, de los mal llamados mexicanos, dado que no todos los habitantes de este país son mexicas.


Una de las razones es que el Estado Mexicano ha excluido totalmente a los pueblos y culturas anahuacas en la construcción y desarrollo de este país. Otra es que siendo una sociedad extremadamente racista y clasista, desde 1521 en la Colonia y a partir de 1821 en el periodo “Independiente”, los pueblos originarios y sus culturas representan, además de un lastre para el desarrollo y una vergüenza para la creación de modelos culturales venidos sistemáticamente del exterior, representan el último peldaño en la escala social.


La investigación de las culturas ancestrales y sus vestigios materiales, en general, ha estado en manos de investigadores, universidades, museos y gobiernos de otros países, en el siglo XIX de Europa y a partir de la segunda mitad del siglo XX de Estados Unidos. Los mexicanos educados académicamente en instituciones de nivel superior, en sus aulas no se les enseñó a conocer y valorar esta riqueza humana. Nuestros profesionistas, en el mejor de los casos y de manera superficial, se adscriben a la “cultura grecolatina”, pero en su Cultura Madre, son extranjeros ignorantes en su propia tierra.


La colonización mental, cultural y espiritual que hemos sufrido los ahora llamados mexicanos es de proporciones terroríficas. Se nos ha borrado totalmente del consciente la “memoria histórica”. Sorprende que una de las civilizaciones más antiguas y con origen autónomo del planeta (como China o India), la que llegó a alcanzar el más alto grado de desarrollo humano, sus actuales descendientes, no conozcan su pasado y sobre todo, que no se reconozcan en ese pasado y menos como herederos directos de él, que no exista ningún aparente vínculo. Que crean que la civilización Madre ya no existe y que desapareció el 13 de agosto de 1521. Que ellos, especialmente el 80% de la población que es mestiza, sienta su endeble identidad en una país o una cultura extranjera. Y que niegue lo que es más que evidente, que son hijos de los hijos de los Viejos Abuelos del Cem Anáhuac. Porque, el “ser mestizo” no cancela ni borra la herencia ancestral –tangible e intangible- de la Cultura Madre, por el contrario, la sostiene y la afirma.


El “mexicano” genética y culturalmente en su mestizaje, está mucho más cerca de la civilización del Anáhuac, que de las culturas de España, Francia o Estados Unidos. Pero por la colonización mental, espiritual y cultural, lo niega y se siente estigmatizado por tener elementos culturales autóctonos. Es más, es un insulto decirle a un mexicano que es “indio, prieto, naco, etc.” No se da cuenta que lo que lo sostiene, le ayuda y le da fuerza y sabiduría para vivir, es justamente lo que tanto desprecia y rechaza. El mestizo y el criollo son dos huérfanos. El primero rechaza a su Madre Cultura y el segundo, es rechazado por la cultura a la que él cree pertenecer, pues para el caso de España, el criollo que presume de ser “español” en México, en España se dice mexicano y los españoles lo llaman “indiano” y no lo aceptan como propio, justamente porque la civilización del Anáhuac lo ha transformado. El criollo es el verdadero personaje del “Laberinto de la Soledad” de Paz, ni de aquí ni de allá.

Dr. Rubén Bonifaz Nuño

Las investigaciones históricas y arqueológicas del Anáhuac están en manos de extranjeros y de sus subordinados y mansos ayudantes mexicanos. Son muy pocos los extranjeros y mexicanos que se oponen a las poderosas mafias de la academia y las instituciones “filantrópicas”. Autores como Bonifaz Nuño, Alfredo López Austin, Guillermo Bonfil, Laurrete Séjurné, Víctor Jiménez, Víctor de la Cruz, Carlos Lenkersdorf y Jan de Vos, por citar algunas valientes y dignos investigadores. El Instituto Nacional de Antropología e Historia enfoca sus limitadas acciones a la arqueología, que sirve al Estado para usar el pasado ancestral como atractivo turístico. La arqueología, la historia y la reflexión sobre esta riqueza para la construcción y fortalecimiento del “SER NACIONAL”, están totalmente fuera de sus políticas. El pasado de la civilización del Anáhuac es solo arqueológico-museográfico-turístico, y esta desvinculado a las tareas de descolonización y del despertar de la consciencia ancestral y la afirmación plena de la identidad.

  
Las zonas arqueológicas, los muesos, los videos, las revistas están pensados desde una mentalidad colonial, colonizadora, superficial y comercial. En sus textos, cédulas, guiones, boletines de prensa, se mantiene el lenguaje colonizador. Se sigue diciendo cínica y des fachadamente: “Prehispánico, precolombino, precortesiano, mesoamerica, Batalla de la noche triste, “caballeros águila y tigre”, se habla de reyes, reinos y princesas que nunca hubo en el Anáhuac, se machaca y se refuerza la idea de los cuantiosos sacrificios humanos y las innumerables guerras, del “encuentro de dos mundos” y no de una invasión, se mantiene la idea de que con los españoles llegó la civilización, la religión, la escritura, el progreso, etc. Se maquillan los crímenes, robos, traiciones de Hernán Cortés y sus secuaces, la conquista religiosa se sigue viendo como una heroica y piadosa epopeya en la que los “naturales mansamente se convirtieron” y no se habla de los crímenes, explotación y abuso de la Iglesia Católica y la Santa Inquisición en contra de los pueblos, sus culturas y su religión milenaria.



El Estado criollo rechaza terca y racistamente la presencia y participación de los pueblos y culturas ancestrales. Se habla de un país “mestizo”, pero ideológicamente el mestizaje se vincula solo a Europa y se regatea la presencia de “nuestra otra parte”. El pueblo mexicano mestizo encuentra la base de su mestizaje en la civilización Madre y no en la de los invasores. En efecto, la milenaria cultura del Anáhuac forma los cimientos de nuestra identidad en los espacios ontológicos y filosóficos. En la forma de ver, sentir y entender el mundo, la vida, la muerte, la familia, la amistad, el trabajo, la fiesta, la comunidad y penetra muy profundo en lo sagrado y lo divino. Esta es la verdadera cara de nuestro mestizaje, y no el fenotipo o el color de la piel.

                                      Mac Donals en México
Querer buscar “los cimientos” y el potencial de nuestro mestizaje en las culturas de España, Francia, Italia, es seguir condenados a transitar a tientas y tropezones en el “laberinto de la soledad”, despreciando lo propio y exaltando lo que nunca podremos ser. Tanto los europeos como los estadounidenses históricamente nos han rechazado, despreciado y explotado. Los modelos económicos, políticos, sociales, culturales, educativos, etc., son una copia siempre mala y tardía. Primero los peninsulares y después los criollos quisieron y han querido hacer de La Nueva España y de México, una realidad mejor que la europea o norteamericana y, como la historia y la realidad nos lo indican, siempre se ha fracasado rotundamente.


Por qué negar lo que somos, por qué excluir nuestra rica y sabia experiencia en el Desarrollo Humano y la organización social, por qué menospreciar los valores y principios ancestrales de nuestros Viejos Abuelos. Por qué no los incorporamos, sin excluir a la parte occidental de la que orgullosamente nos hemos apropiado en estos cinco siglos. Por qué los europeos para salir de la Edad Media buscaron inspiración en su pasado grecolatino y por qué nosotros no lo podemos hacer en el pasado del Anáhuac. Por qué China, India y Japón basan su modernidad y desarrollo en su pasado y en sus culturales ancestrales y nosotros no lo podemos hacer.


Por ahora, en México la arqueología y la historia oficial están al servicio de la ideología del Estado criollo y del capital trasnacional. Inexorablemente llegará el tiempo en el que la Historia será liberadora y la arqueología servirá de inspiración para re-construir nuestra milenaria organización social y los valores perenes que ella usó como recurso para mantener por mil años un periodo de esplendor, único en el planeta.





               Lo difícil no es hacerlo…sino                 IMAGINARLO.


                                   visite http://www.toltecayotl.org/

Le invitamos a que vea los videos sobre la civilización del Anáhuac.
1.- LA CIVILIZACIÓN DEL ANÁHUAC
2.- PERIODO PRECLÁSICO LOS OLMECAS
3.- PERIODO CLÁSICO LOS TOLTECAS
4.- PERIODO POSTCLÁSICO LOS MEXICAS
5.- PIRÁMIDE DE DESARROLLO HUMANO DEL ANÁHUAC
6.- LA TOLTECÁYOTL
7.- TLOQUE NAHUAQUE LO DIVINO Y LO SAGRADO
8.- EL MITO DE LOS GUERREROS AZTECAS
9.- LOS TOLTECAS
10.- PERIODO CLÁSICO O DEL ESPLENDOR
11.- LA AGRICULTURA EN EL ANÁHUAC
12.- LOS TRES CÍRCULOS DE CONOCIMIENTO
13.- LOS GUERREROS DE LA MUERTE FLORECIDA
14.- LAS ZONAS CULTURALES DEL ANÁHUAC
15.- QUETZALCÓATL
16.- EL COLAPSO DEL PERIDO CLÁSICO
17.- LAS CIVILIZACIONES MÁS ANTIGUAS DEL MUNDO
18.- LOS SEIS ELEMENTOS CULTURALES QUE DISTIGUEN A LA CIVILIZACIÓN DEL ANÁHUAC
19 La Batalla Florida


 

10 comentarios:

Anónimo dijo...

revelador y excelente. gracias.

Anónimo dijo...

Marín: eres un cretino que no sabes NADA de historia y menos de arqueología. Para que sepas, la arqueología es una ciencia muy seria y los arqueólogos mexicanos somos reconocidos a nivel mundial. Tus panfletos denigran nuestra gran labor por el rescate de la cultura de México. Lo que necesitamos es mayor presupuesto.
Como se que NO PUBLICARÁS ESTO, te lo dejo para que sepas con quien te estás metiendo.

Raul Gutierrez dijo...

Don Guillermo, su página web es muy interesante, contiene información que INAH y sus gentes deberían investigar, en lugar de criticar. Yo confío en que algún día despierten de su letargo colonial y se den cuenta de su ceguera, que además es vergonzosa. ¿Darles más presupuesto para que sigan promoviendo la “Noche triste” y lo “Prehispánico”? ¡Ya basta! Lo felicito por su trabajo.

Anónimo dijo...

Raúl Gutiérrez debe usted saber que el INAH es una institución muy seria y respetable que está consagrada a la investigación, preservación y difusión del patrimonio histórico de la nación mexicana y en la ley están sus atribuciones. Cuenta para lograr sus objetivos a reconocidos especialistas e investigadores.
Estoy de acuerdo con el colega que Marín es un cretino irresponsable que trata de ser famoso echando tierra a investigadores de verdad y a la máxima institución en México en la investigación de antropología e historia. Sus mentiras y calumnias no tienen ningún sustento científico y menos académico.
Raúl, si no sabe, no opine. Mejor vuelva a colgarse de su rama y mantenga la trompa cerrada.

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con Raúl, me parece importante dar nuestra opinión con nuestro nombre y es cobardía desde el anonimato.
Guadalupe Sánchez

Anónimo dijo...

Existen pocos lugares en los blogs donde se puedan leer cosas interesantes. Mucha paja y mucho ego entre enajenados y exaltados, pero en general…con poca substancia.
Este blog es muy interesante y nos presenta ideas novedosas de conceptos y criterios muy viejos, especialmente con lo historia prehispánica y la realidad nacional.
Puede uno estar de acuerdo con el autor o no estar de acuerdo… o en parte. Pero lo que se debe reconocer es que es un blog que estremece y nos hace pensar y sentir las cosas desde otra dimensión.
Eso es lo que me gusta y cada semana busco en este blog alguna nueva propuesta para pensar y repensar lo que somos desde una diferente perspectiva. Creo que eso es lo valioso de los blogs y de la Internet en general.
Felicito a todos. Al autor, a sus detractores, a sus lectores y a sus “admiradores”. El verdadero problema es que no pensamos y analizamos la información.
Que tengan un magnífico día.
Elizabeth Montaño.
Zacatecas, México.

Anónimo dijo...

Lo que marin afirma es muy cierto, solo los que estamos en el centro del hormiguero sabemos las verdades ocultas del INAH, sus funcionarios corruptos y pasajeros, sus investigadores arribistas y oportunistas y sus trabajadores mañosos y apoyados por un sindicalismo marciano y corrupto.
El INAH no trabaja para el país, solo sirve a los intereses de grupos de poder, ya sean funcionarios o investigadores y trabajadores. Pero todos agachan las corvas ante el dólar que viene por medio de universidades gringas y sus prepotentes investigadores, ellos son los que tienen el sartén por el mango.
Anónimo por fuerza no por falta de valor.

Anónimo dijo...

Es bueno encontrar un blog como este. Son puntos de vista diferentes que informan y enriquecen. Chicos no sean tan pasionales.
Amapola.

aosgregorio dijo...

Gracias a los que opinan de formas tan diferentes es como crece el conocimiento, de lo contrario estariamos pasmados sin evolucionar.El Materialismo Dialectico así lo confirma,sigamos opinando para centrar nuestra posición y así seamos mexicanos de tiempo completo.
Felicidades al Maestro Marín.

Cantacuceno dijo...

JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA, este blog me ha alegrado la vida por lo que resta del año. Orgullosamente "criollo", mexicano y occidentalmente americano.